domingo, 29 de diciembre de 2019

Piedad


¿Hasta cuándo seguiremos agradeciendo la piedad de nuestros verdugos?
¿Hasta cuándo el cirio caliente va a pegotearnos los dedos?

No alcanza cantarle al Paraná
dormir con extraños
bombardear ciudades

La muerte no se esquiva por muy bonito que la sepamos contar

Envidio a los poetas que le escriben a la libertad
Nunca entendí las fronteras

Ya no vamos a cruzar el río
No vale la pena

Me pregunto si es esto la vejez
Si la derrota es un lugar parecido a la muerte

¿Quién va a recordarnos mañana si no plasmamos nuestras miserias?
¿Hubo acaso
alguien
dispuesto a escucharnos en vida?

Ya no soy la que cantaba
la que escribió
una esposa

la más triste y la más fiel de todas las amantes

Les pregunto a mis verdugos si es esto la libertad y mis verdugos me ignoran
siempre me ignoran
A eso lo llaman piedad y me ignoran

Fui sirena una vez
para terminar muerta en las manos de un pescador
de uno cualquiera
Como ayer
Como siempre

Yo le cantaba al Paraná
él limpiaba su cuchillo
y rezaba
Griselda Perrotta